Abstract |
En las últimas décadas y en la inmensa mayoría de las ciudades, los índices de motorización y la demanda de movilidad en vehículo privado aumentan continuamente y con ellos el consumo de energías no renovables, la contaminación atmosférica, el ruido ambiental, la intrusión visual, los accidentes, el peligro y la congestión circulatoria. El planeamiento urbano y la organización de la infraestructura territorial de una ciudad tiene una gran responsabilidad en la gestación de la demanda urbana de movilidad y condiciona de forma importante las posibles respuestas a la misma, en la medida en que define los modelos territoriales y urbanos, la densidad, la distribución espacial de los usos, la disposición de plazas de aparcamiento, etc., principales condicionantes de la demanda de movilidad, además localiza y diseña los espacios públicos y la red viaria, favoreciendo explícita o implícitamente a unos u otros medios de transporte. En nuestro país, el transporte público en bus presenta muchas debilidades para los usuarios que deben utilizar diariamente este medio de transporte, inconvenientes relacionados con la seguridad en el interior de los buses, frecuencias e itinerarios que no se cumplen, demoras en los traslados por unidades que no cumplen sus horarios, maltratos a los pasajeros, falta de equipamiento y facilidades para el traslado de personas con discapacidades, tarifas definidas sin base técnica, son entre otras, las deficiencias que el usuario debe superar a la hora de tomar un bus del transporte público, frente a ello, en los últimos años, se ha presentado atractiva la posibilidad de adquirir automóviles, lo cual ha desembocado en que cada vez más familias adquieren vehículos para su transporte, incrementando con ello la disputa con los buses por un espacio en las calles de las ciudades. Por lo dicho, cada día se convierte en una necesidad más urgente de introducir en la práctica de la planificación urbanística, la reflexión sobre las consecuencias que las decisiones urbanísticas tienen en el ámbito de la movilidad y por tanto, en el uso del automóvil privado y público así como sus impactos asociados. Este trabajo pretende plantear, precisamente, algunas de las herramientas existentes en la ingeniería de transportes, que sirven de base para responder esta necesaria reflexión, analizando la competitividad existente entre el transporte público y privado, en un sector muy representativo del norte de la ciudad de Guayaquil. |