Después de más de 50 años de conflicto armado el Gobierno y las FARC se sientan en una mesa en busca de una salida negociada que ponga fin a los enfrentamientos. Ninguna de las partes la tiene fácil. Ni el Gobierno con su poder Constitucional que se le otorga como máxima autoridad, ni la guerrilla que sigue asiendo suya la lucha en busca de una Colombia más equitativa. Al cierre de este trabajo la negociación había alcanzado puntos históricos en acuerdos como el de desarrollo agrario, participación política y solución al problema de las drogas ilícitas. Avances que no sólo han despertado el interés de la comunidad nacional sino también la internacional que ven la posibilidad de desmovilizar la guerrilla más vieja de Latinoamérica. De ahí la importancia de destacar el trabajo con grupos sociales que no están directamente vinculados al conflicto, pero que serán en últimas los que facilitarán o no la implementación de los acuerdos. Y es que no será hacer “borrón y cuenta nueva” cuando por lo menos tres grupos más al margen de la ley seguirán delinquiendo, mientras un grupo intenta reintegrarse a la sociedad. El propósito del proyecto era describir los imaginarios que ocho niños entre los 9 y los 13 años de colegios de diferente origen socioeconómico de Bogotá, poseían sobre el proceso de paz a partir de la información que reciben de los medios de comunicación. Con esto en el horizonte se propuso desglosar esa realidad macro que implican las negociaciones en dos niveles: por un lado el de los actores involucrados y por el otro, un nivel conceptual alrededor de los términos de la paz, el conflicto y la reconciliación. Un antes –el conflicto-, un durante –la reconciliación- y un después –la paz-. Pero la realidad es otra. Entre los resultados más relevantes se encontró que del conflicto colombiano y su historia es poco o nada lo que saben. Después de tantos años de guerra lo que ha pasado no es claro para el país, ni para los teóricos y mucho menos para la infancia que aún depende del esclarecimiento de una historia que aterrice los contenidos a las aulas. En ese sentido, se encontró que si no conocen con claridad el conflicto armado, tampoco tienen noción de los acuerdos alcanzados durante el proceso de paz en La Habana.