El análisis de cohortes muestra diferencias en el perfil de los “nuevos” y “viejos” migrantes regionales residentes en Argentina y Brasil. En Argentina quienes se radicaron en los ochenta y noventa estaban más escolarizados y calificados que sus predecesores. En Brasil, el perfil predominantemente calificado de los migrantes del Cono Sur se atenuó, porque entre quienes se radicaron en esas décadas creció la participación de personas con nivel medio de escolaridad y cayó el porcentaje de graduados universitarios y de ocupados en funciones directivas, profesionales y técnicas.
Este artículo también compara el nivel de concentración y segregación, según ramas de actividad económica y ocupación de migrantes y nativos. Concluye que en Argentina, los hombres y mujeres bolivianos y brasileños estaban más concentrados que los trabajadores nativos en la agricultura; los hombres bolivianos, paraguayos y chilenos, en la construcción y las mujeres bolivianas, chilenas, paraguayas y uruguayas, en el servicio doméstico. En Brasil, los hombres y mujeres argentinos, chilenos y uruguayos y los hombres bolivianos estaban más concentrados que los trabajadores nativos en ramas vinculadas a la educación, salud y servicios sociales y personales. En Argentina, la calificación de las ocupaciones de los hombres argentinos y uruguayos y de las mujeres argentinas y brasileñas se asemejaba, mientras que las mayores diferencias con la mano de obra nativa correspondían a los hombres bolivianos y a los paraguayos de ambos sexos. Los índices de segregación laboral, por rama y ocupación, muestran que en Brasil estaban más segregados los trabajadores chilenos y más integrados, los paraguayos.