Abstract |
La presente investigación muestra cómo, pese a un fuerte discurso soberanista, en los primeros tres años de gobierno ecuatoriano de Rafael Correa la situación de la Frontera Norte no ha variado significativamente, puesto que no se han podido traducir las intenciones de cambio en una política de soberanía con impactos efectivos. En esta volátil región coexiste una serie de actores con intereses diversos que ponen en disputa constante la definición del concepto de soberanía. La confluencia de procesos locales, nacionales e internacionales, sumados a dinámicas supranacionales, posnacionales y transfronterizas en esta región hacen de ella un caso ideal de estudio. El gobierno ha intentado impulsar una agenda de desarrollo que mejore su presencia en estos territorios, en pos de ganar jurisdiccionalidad de manera pacífica sobre su población. Sin embargo, la difícil situación con Colombia, así como las condiciones de violencia, han mantenido una inercia estatal que recurre al gasto militar y al uso de la fuerza pública para mantener la ley y el orden. La Frontera Norte muestra que la historia avanza y que la lucha por el dominio y el control territorial no han perdido vigencia. |